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miércoles, 22 de enero de 2020

Profundidad 6 (Sean S. Cunningham, 1989)


La armada de los Estados Unidos instala una base nuclear a seis millas de profundidad en el océano. Un equipo de investigación, dirigido por el doctor Gelder, descubre una cueva. Éste ordena explosionarla para poder acceder a su interior. Momentos después, el centro de operaciones es atacado de forma violenta por una extraña criatura marina que ha estado oculta en la cueva durante miles de años. El peligro es inminente, las reservas de oxígeno se agotan y los científicos tratan, desesperadamente, de ponerse a salvo...
Nueve años después de Viernes 13 (1980) y cuatro tras aquella pequeña joyita protagonizada por la guapa Lori Loughlin llamada La gran revancha (1985), el bueno de Sean S. Cunningham se subía al carro del terror subacuatico (aunque todo sea dicho; desarrollo la idea en 1987 con el propósito de ser la primera película de acción/ciencia ficción bajo el agua de las varias que llegarían), muy de moda en el año 1989 gracias a películas como Abyss (James Cameron), Leviatan: El demonio del abismo (George P. Cosmatos) y Los señores del abismo (Mary Ann Fisher) con esta Profundidad 6, que originalmente iba a dirigir Robert harmon, que venia de petarlo con Carretera al infierno (1986) pero que decidió rechazar el proyecto para dirigir un infumable drama con John Travolta llamado De pura raza (1991). En fin, Harmon se dio el piro para dirigir basurilla (luego se resarció junto a Van Damme en la mítica Sin escape (1993) y Cunningham fue el elegido por Mario Kassar y Andrew Vajna, bajo su mítico sello Carolco Pictures (la distribución quedaría a cargo de TriStar Pictures), productores de pepinazos como Acorralado (Ted Kotcheff, 1982), Danko: Calor rojo (Walter Hill, 1988), Desafio total (Paul Verhoeven, 1990), Terminator 2: El juicio final (James Cameron, 1991), Soldado universal (Rolan Emmerich, 1992) o Máximo riesgo (Renny Harlin, 1993) para que dirigiese el cotarro. Del guion se hizo cargo Lewis Abernathy. Bueno, realmente ya lo tenia escrito y lo único que hizo es venderlo (James Cameron que por aquel entonces andaba escribiendo Abbys le pidio a Abernathy que retrasase su venta ya que sino ambas películas, de temática similar, competirían en taquilla al mismo tiempo, pero Abernathy le dijo que ni de coña y a partir de entonces se convirtió en un apestado para Cameron. Por lo que se conoce retomaron su amistad años después cuando Abernathy acompaño a Cameron en la filmación de los restos del Titanic para su película de 1997 y en la que tiene un pequeño papel Abernathy). Bueno, volvamos al guion, Abernathy solo volvió a ejercer de guionista en una Tv Movie llamada Invasión Final (dirigida también por Sean S. Cunningham en 2002) y se dejo ver en labores de dirección con House IV (directa a vídeo) y como actor en Titanic (James Cameron, 1997). Para desarrollar el guion se junto con Geoff Miller, que mas allá de su participación en esta, lo único destacable (por decir algo) que se puede decir de eles que también ejerció como guionista en House IV (supongo que se harían coleguitas mientras escribían Profundidad 6).
De la música se hizo cargo el compositor, solista de Jazz y especialista en bandas sonoras de films de terror Harry Manfredini, que ya había colaborado junto a Cunningham en Viernes 13 (1980) y que se hizo cargo de la partitura de la saga hasta Viernes 13: El final. Jason se va al infierno (Adam Marcus, 1993) y que en su haber tiene partituras como La cosa del pantano (Wes Craven 1982), House, una casa alucinante (Steve Miner, 1985), Águila de acero III (John Glen, 1992) o Kickboxer III: El arte de la guerra (Rick King, 1992).
Para la fotografía se requirieron los servicios del sueco Mac Ahlberg, que venia de rodar películas como Ghoulies (Luca Bercovici, 1984), Re-Animator (Stuart Gordon, 1985) o Ciudad fantasma (Richard McCarthy, 1988) y de la creación del monstruo marino se encargo Chris Walas, quien luego entrego sus diseños al jefe de FX Mark Shostrom quien hizo pequeñas modificaciones en la criatura. La pelicula fue rodada íntegramente en Los Ángeles, contó con un presupuesto de 8 millones de dolares y su recaudación a nivel mundial fue de unos miseros 8.143.225 dolares, convirtiéndose en un estrepitoso fracaso como todas las producciones que ese año se hicieron sobre terror acuático a excepción de Abbys de James Cameron.
En cuanto al elenco principal, debido al ajustado presupuesto, se contrato a actores reconocidos de la televisión pero con poco cache para no disparar el coste de la producción. Así se eligió a Greg Evigan, que venia de interpretar esporádicos en series como El hombre de los seis millones de dolares (1976), Dallas (1978), Fama (1983), Se ha escrito un crimen (1986), Hotel (1986) o Mike Hammer (1987) para interpretar al "héroe" de la peli, MacBride. Para su "love interest" Collins, se contrato a la guapa Nancy Everhard, que también venia de hacer pequeños papeles en series como Enredos de familia (1985), El coche fantástico (1986), El equipo A (1986) o Remington Steele (1986) y que tras esta, salvo pequeños papeles en la cutre The Punisher (Mark Goldblatt, 1989) junto a Dolph Lundgren y en la genial 48 Horas mas (Walter Hill, 1990) volvió a la pequeña pantalla hasta el 2006 que es donde se pierde su rastro. Para meterse en el papel del jefe de la basa, Ladilaw, se ficho a Taurean Blacque, actor de gran fama y reconocimiento en ese momento gracias a su recordado papel del detective Neal Washington en la famosa serie Canción triste de Hill Street (1981-1987). Cindy Pickett interpetaria a la doctora de la base Diane Norris. Picket también venia de hacer esporádicos en series como Magnum (1984), Alfred Hitchcock presenta (1986) u Hospital (1986-1988) donde si tuvo un papel de mas recorrido interpretando a la doctora Carol Novino, pero tras aparecer en Profundidad 6 su carrera cinematográfica tampoco logro despegar y volvió a la televisión. Matt McCoy, que acababa de convertirse en el relevo de Steve Guttenberg en Loca academia de policía 5: Operación Miami Beach (Alan Myerson, 1988) seria el piloto y "manitas" Richardson y la absolutamente preciosa y extremadamente atractiva Nia Peeples, que venia de petarlo interpretando a Nicole Chapman en Fama (1983-1986) y que mas tarde me daría grandes mañanas de alegrías en la mítica Walker, Texas ranger (1999-2001) interpretando a la patea-culos Sydney Cooke, se haría cargo del papel de la bióloga marina Scarpelli, el papel del doctor Van Gelder recayó en Marius Weyers, actor sudafricano conocido por películas como Los dioses deben estar locos (Jamie Uys, 1980), Gandhi (Richard Attenborough, 1982) o Diamante de sangre (Edward Zwick, 2006) y me dejo para el final a Snyder, que tiene un papel bastante agradecido (la manera de joder todo lo que hace es sublime) y esta interpretado por el actor mas conocido y de mas trayectoria de todo el elenco, el gran Miguel Ferrer, que estaba recién salido de Robocop (Paul Verhoeven, 1987) y que luego, ademas de infinidad de papeles televisivos dejo su impronta en películas como Revenge (Tony Scott, 1990), Hot Shots 2 (Jim Abrahams, 1993) o En el punto de mira (John Badham, 1993).
A ver, la critica y gran mayoría de publico ponen a esta película a parir, esta claro que no es Abyss, pero que queréis que os diga, yo la he revisionado ahora tras años sin verla y me ha funcionado a las mil maravillas, cierto es que la trama no tiene mucho empaque, que los personajes están pobremente desarrollados y que el "monstruo" no da mas de si, pero, joder, es una serie B con mucho encanto, los personajes tienen carisma de novelucha pulp (en el buen sentido) y la ambientacion, decorados y la atmósfera de la base acuática están logradisimos y hacen que te metas de lleno en la película. En fin, que siendo lo que es a mi me ha entretenido de lo lindo, así que no puedo mas que recomendarla. 6/10

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