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miércoles, 29 de marzo de 2017

The Mighty Ducks (1992)


Título Original: The Mighty Ducks
Título Traducido: Somos Los Mejores
Año: 1992
Duración: 93 Minutos
País: Estados Unidos
Director: Stephen Herek
Guion: Steven Brill
Música: David Newman
Fotografía: Thomas Del Ruth
Reparto: Emilio Estevez, Joss Ackland, Joshua Jackson, Lane Smith, Josef Sommer, Heidi Kling, Elden Ratliff, Shaun Weiss, Matt Doherty, Brandon Quintin Adams, Marguerite Moreau.
Productora: Walt Disney Pictures
Género: Comedia / Deporte
Sinopsis: Gordon Bombay (Emilio Estevez) es un ambicioso abogado que participa con intensidad del mundo competitivo y despiadado en el que debe desenvolverse. Pero sus valores se tambalean por completo cuando un juez decide condenarle a realizar un trabajo de rehabilitación social. La tarea que se le encomienda, y de la que no puede escapar, es entrenar a un equipo infantil de hockey. Sin embargo, el abogado termina por encontrar en la condena un nuevo sentido a su vida.

Hay gente que ve una película cuando es jovenzuelo y no vuelve a ella hasta pasados muchos años -o ni siquiera vuelve-, por temor o certeza de que se llevaran una decepción. Pues bien, ese no es mi caso, ya que las películas que me gustaban cuando era un crio las he seguido viendo a medida que iba creciendo y me han seguido gustando con el paso de los años. Y ese es el caso de esta Somos los mejores (Stephen Herek, 1992), la primera vez que la vi me encanto, salí del cine queriendo ser un "Pato" y eso que yo de hockey ni puta idea y reconozco que me saco unas lagrimillas, llamadme sentimental o moñas, me da igual, pero lo cierto es que no importa las veces que la vea que me sigue gustando igual que la primera vez y lo que es más preocupante, me sigue haciendo llorar, supongo que me vienen recuerdos de la primera vez y no puedo evitar que mis ojos se conviertan en cataratas, que se le va a hacer. 
La peli cuenta con un guion de Steven Brill, una brillante banda sonora de David Newman aderezada con temas de Queen y The Outfield y como no podía ser de otra manera está producida por Walt Disney Pictures, se rodo íntegramente en Minnesota (EEUU) y tuvo un presupuesto de 10 millones de dólares, recaudando 50 en los Estados Unidos, convirtiéndose en un éxito instantáneo, hecho que desemboco en varias secuelas e incluso la creación de un equipo de Hockey profesional, los Mighty Ducks of Anaheim (propiedad de la Disney, of course).
Gordon Bombay (Emilio Estévez) era una joven promesa del hockey infantil de Minneapolis (Minnesota), era la estrella de los Hawks, el equipo infantil más laureado del estado liderado con mano de hierro por el entrenador Reilly (Lane Smith), durante las finales Bombay fue elegido por Reilly para lanzar un penalti decisivo, a este solo le valía la victoria -¡ganar, ganar y ganar!-, todo lo que no fuese ganar era un fracaso, pues bien, Bombay falla el penalti y los Hawks pierden el campeonato en la prórroga, tras el fallo y el rapapolvo de Reilly Gordon se viene abajo y decide dejar de lado su prometedora carrera y lo que más amaba, el hockey sobre hielo. Ahora, pasados 20 años, Gordon se ha olvidado por completo del hockey, es un reputado abogado sin escrúpulos que aun arrastra el trauma de que para ser el mejor solo vale ¡ganar, ganar y ganar! sea como sea. Cierto día, tras un juicio en el que sale victorioso -como de costumbre- se sube a su coche mientras le da al bebercio a modo de celebración y la policía le trinca. Durante el juicio, el fiscal y el juez, que lo tienen enfilado por sus malas prácticas, se lo quieren crujir, pero el jefe de Gordon, un importante magnate de la zona llamado Gerald Ducksworth (Joseff Sommer) intercede para no desprestigiar al bufete donde trabaja y acuerda con el juez ponerle una multa, apartarlo un tiempo del trabajo y lo que más le jode a Bombay, trabajar 500 horas para la comunidad. Para colmo de males a Bombay lo endiñan a currar como entrenador de hockey del equipo juvenil del distrito cinco con una panda de gamberros entre los que están Charlie Conway (Joshua Jackson, en un papel para el que se pensó tanto en Leonardo DiCaprio y Jake Gyllenhaal), Goldberg (Shaun Weiss), Les Averman (Matt Doherty), Jesse Hall (Brandon Quintin Adams), Peter (J.D. Daniels), Guy Germaine (Garette Ratliff Henson), Terry Hall (Jussie Smollett), Karp (Aaron Schwartz) y Connie (Marguerite Moreau). Estos son el peor equipo de la ciudad, no han ganado ni un solo partido, carecen de disciplina y para rematar la faena a su último entrenador le dio un infarto. Pues bien, Bombay se tendrá que hacer cargo del equipo, hacer que jueguen como tal y de paso dejar atrás sus traumas de la infancia y volver a sentir lo que sentía por el hockey cuando era pequeño y volaba por la pista de hielo.
Bueno, soy consciente de que estamos ante una película para la chavalería, pero yo la disfrute como un perro cuando la estrenaron y la verdad es que sigo disfrutándola hoy en día, cierto es que está cargada de arquetipos y clichés típicos de estas películas que mezclan niños y deportes, pero aun así mola que te cagas joder, tiene sus valores, su emoción -aun me saca alguna lagrimilla- y su sensiblería barata de esa que se le da tan bien a Disney, `pero que funciona a las mil maravillas. De los apartados técnicos poco hay que decir, es todo sumamente correcto y en cuanto a los actores pues destacar al grandísimo y mítico -para mí- Emilio Estévez  y a Joss Ackland, que ejerce de abuelo cebolleta que sirve como catalizador del cambio de forma de ser -junto a los críos- del personaje de Estévez, los chavales están todos geniales, creando una amalgama de caracteres muy bien diferenciados entre ellos, pero entre todos destaca Joshua Jackson, coprotagonista del film y hoy en día conocido por series como Fringe o The Affaire y por haberse trajinado a la bella Diane Kruger. Lo dicho, puede que si nunca la has visto y la ves de nuevas con pelos en los huevos te parezca una soberana tontería, pero para mí siempre ha sido un peliculón como la copa de un pino al que vuelvo siempre por mucho que pasen los años y que sigue divirtiéndome y emocionando como la primera vez. ¡Cuac, cuac, cuac!

7 / 10
 

domingo, 26 de marzo de 2017

La Madre Muerta (1993)


Título Original: La Madre Muerta
Año: 1993
Duración: 107 Minutos
País: España
Director: Juanma Bajo Ulloa
Guion: Juanma Bajo Ulloa / Eduardo Bajo Ulloa
Música: Bingen Mendizábal
Fotografía: Javier Aguirresarobe
Reparto: Karra Elejalde, Ana Álvarez, Lio, Silvia Marsó, Elena Irureta, Ramón Barea, Raquel Santamaría.
Productora: Gasteizko Zinema / Sogepaq
Género: Drama / Secuestros
Sinopsis: Ismael (Karra Elejalde) ha cometido varios asesinatos, pero sólo uno de ellos, por sus consecuencias, continúa obsesionándole. La hija de una de sus víctimas (Ana Álvarez), una niña de corta edad que presenció el crimen, quedó tan impresionada que perdió la razón. Veinte años más tarde, Ismael la secuestra para determinar si ella lo reconoce o no como el asesino de su madre.

Segundo largometraje de Juanma Bajo Ulloa tras Alas de Mariposa (1991). Rodado entre el País Vasco y Castilla y León, estrenada en 1993 tras llegar avalada por su pase en numerosos festivales con premios a Ulloa y Álvarez incluidos, con guion del propio Ulloa con la colaboración de su hermano Eduardo, producida por Fernando Bauluz, con fotografía de Javier Aguierresarobe, música de Bingen Mendizábal e interpretaciones de Karra Elejalde, Ana Álvarez, Lio y Silvia Marso en sus papeles principales. 
La película está considerada para muchos la mejor del director e incluso se la tiene por una obra de culto, según las palabras del propio Ulloa estamos ante "Un cuento cruel, para adultos, que narra lo mismo que todos los cuentos desde Caperucita Roja: el contraste entre inocencia y brutalidad". A mí, personalmente me ha parecido una película que tiene un buen arranque pero que se va desinflando a medida que pasan los minutos. 
La historia nos presenta a Ismael López (Karra Elejalde) un ladronzuelo y psicópata de manual que cierto día entra a robar en casa de una restauradora, al toparse con ella le pega un escopetazo y la mata, pero la mujer no estaba sola en casa, también estaba su hija pequeña Leire (Raquel Santamaría). El tarao de Ismael no lo duda y le pega un tiro también a la cría. 20 años después Ismael sigue siendo un delincuente pero ahora tiene una compinche y amante llamada Maite (Lio). Ismael trabaja en un Night Club sirviendo copas y cierto día al abrir el local se topa con Leire (Ana Álvarez). Resulta que la cría sobrevivió al disparo y ahora pasa sus días en una especie de manicomio ya que el disparo le dejo secuelas y desde entonces no habla y es deficiente mental. Ismael que desde entonces vive obsesionado por lo ocurrido y temiendo que la joven se acuerde de él y pueda identificarlo decide que lo mejor es secuestrarla para saber si le recuerda y en ese caso asesinarla. 
Bueno, como he dicho antes me parece una película que va perdiendo fuelle a medida que avanza, cierto es que es bastante cruel y sombría y los paralelismos con Caperucita Roja se pueden ver en la relación entre los personajes de Karra Elejalde y Ana Álvarez pero jamás se me ocurriría tildara de obra maestra ni de culto. Tras un interesante arranque la película se vuelve tediosa y repetitiva hasta el hartazgo, con un guion que da vueltas sobre sí mismo una y otra vez, que apenas avanza y va perdiendo interés, al igual que los personajes que tampoco tienen un recorrido dramático. Cierto es que Ana Álvarez se marca un papelón, si no conociese a la actriz creería que es una deficiente mental realmente, pero al final acaba por cansar su actuación por reiterativa, de Karra Elejalde solo puedo decir que me ha parecido excesivo y pasado de vueltas, con una interpretación más calmada hubiese dado poso y profundidad a un personaje que al final resulta patético. En fin, que la peli no me ha gustado nada, tras los primeros 20 minutos ya estaba ansiando que acabase, si tuviese que resaltar algo interesante, además del prometedor punto de partida seria la estupenda fotografía de Javier Aguirresarobe y la música de Bingen Mendizábal, por lo demás me parece una película sobrevalorada.

2 / 10
 

domingo, 19 de marzo de 2017

Altitude (2017)


Título Original: Altitude
Año: 2017
Duración: 83 Minutos
País: Estados Unidos
Director: Alex Merkin
Guion: Tyler W. Konney, Jesse Mittelstadt, Richard Switzer
Música: Bobby Tahouri
Fotografía: Dane Lawing
Reparto: Denise Rechards, Dolph Lundgren, Jonathan Lipnicki, Greer Grammer, John Posey, Jordi Vilasuso, Kirk Barker.
Productora: Switzer Entertainment Group / Taylor, Dodge / Safier Entertainment
Género: Acción / Thriller
Sinopsis: Una agente federal deberá hacer frente a un secuestro aereo. 

Como fan del cine de acción y asiduo a los videoclubs en mi más tierna infancia siempre me han atraído las cintas del genero que transcurrían en aviones, por ejemplo las magnificas Pasajero 57 (Kevin Hooks, 1997), Salto al Peligro (John Badham, 1994) o Turbulence (Robert Butler, 1996) por citar algunas. Así que cuando vi esta Altitude (Alex Merkin, 2017) para descargar no lo dude, sabía que era una Serie B directa a DVD, pero entre que la trama transcurría en un avión y que estaba protagonizada por dos clásicos como Dolph Lundgren y Denise Richards no pude evitar caer en la tentación. 
La trama, escrita por Tyler W. Koney, Jesse Mittelstadt y Richard Switzer nos presenta a Gretchen Blair (Denise Richards) una agente del FBI especialista en negociaciones con rehenes, tras su ultima misión su superior se cabrea un huevo con ella -pese a solventar el secuestro sin bajas- porque se salta todas las normas y se pasa por el forro los procedimientos así que la releva del puesto y la manda a Washington para que se pudra bajo una lapida de informes en una oficina. Así que la buena de Gretchen se sube a un avión y por casualidades del guion acaba sentada en primera junto a un hombre llamado Terry (Kirk Barker). Este, tras un intento de flirteo y tras averiguar que ella es agente federal le cuenta que hay un grupo de secuestradores en el avión, liderados por una mujer llamada Sadie (Greer Grammer) que para más inri es su ex que quieren apoderarse de algo muy valioso que el lleva encima, así que le hace una suculenta oferta a Gretchen: Si me ayudas e impides que secuestren el avión te recompensare con 50 millones de dólares. Por supuesto, Gretchen no se cree nada de lo que dice Terry y lo toma por loco, pero poco a poco ira dándose cuenta de que algo raro pasa en el avión y descubrirá que Terry no mentía. Ahora, Gretchen, con la ayuda de una gente de incognito que va en el avión llamado Luke Byres (Jordi Vilasuso) tendrá que hacer frente a los secuestradores entre los que se encuentra Sharpe (Dolph Lundgren) y averiguar que cojones lleva encima Terry que tiene tanto valor para este grupo de sabandijas aéreas. 
Bueno, sabía de antemano a lo que me enfrentaba viendo esta película, así que la vi con el chip adecuado para no cortarme las venas durante su visionado. El hecho de que apenas dure 83 minutos también ayudo para no tirarme por el balcón, pero aun así es una castaña pilonga que no recomendaría a nadie a no ser que seas un consumidor habitual de las películas que cuelgan en "Mataromorir". El arranque pintaba bien y el hecho de que la acción transcurriese en un avión secuestrado también, pero a partir de ahí todo se viene abajo, el desarrollo de la trama y el de los personajes es tan cutre e inexistente que te planteas seriamente como pueden haber escrito esto entre tres personas y que estas aun sigan en el negocio y no aumentando las colas del paro. 
Lo único salvable es la presencia de Lundgren y Richards, que aportan carisma, sin ellos la película no daría ni para ser emitida por La Sexta un domingo por la tarde, con ellos se queda en aceptable para Cuatro un sábado por la tarde, poco más. El bueno de Dolph Lundgren aporta su rocoso físico y poco mas ya que se pasa tres cuartas partes del metraje pilotando el avión y Denise Richards -¡Ay, Denise!- aporta intenciones y ganas pero está muy limitada facialmente -vamos, que la cara se le cae-, además, esta mujer ya no es lo que era, tuvo sus quince minutos de gloria, en este caso tres años, los que van desde el 1997 que estreno Starship Troopers, pasando por Juegos Salvajes (John McNaughton, 1998) y finalizando con su participación como chica Bond en El Mundo Nunca Es Suficiente (Michael Apted, 1999). Tras esto, la nada. No sé si es debido a tanta operación estética o a haber perdido sus gloriosas curvas noventeras pero la buena de Denise ha perdido todo su magnetismo. Por lo demás tenemos un CGI de primero de Asylum, una dirección ramplona y desganada, unas escenas de acción de vergüenza ajena, unas interpretaciones secundarias que dan pena, unos extras -los pasajeros del avión- que los deben de haber sacado de la cola del cine directamente y un pretendido humor que sobrevuela todo el metraje que va mas allá de lo lamentable. En fin, que la película es un autentico bodrio, pero aun así me la he tragado como un campeón. Sabiendo a lo que te enfrentas incluso puede entretenerte, de aquella manera y puede que le veas cierto encanto. Eso sí, jamás la volveré a ver.

3 / 10
 

viernes, 17 de marzo de 2017

Keeping Up With The Joneses (2016)


Título Original: Keeping Up With The Joneses
Título Traducido: Las Apariencias Engañan
Año: 2016
Duración: 105 Minutos
País: Estados Unidos
Director: Greg Mottola
Guion: Michael LeSieur
Música: Jake Monaco
Fotografía: Andrew Dunn
Reparto: Zach Galifianakis, Jon Hamm, Isla Fisher, Gal Gadot, Paton Oswalt, Ming Zhao, Dennise Renae.
Productora: Fox 2000 Pictures / Parkes+MacDonald Image Nation
Género: Comedia / Acción
Sinopsis: Una convencional pareja (Zach Galifianakis & Isla Fisher) de un aburrido barrio residencial se ve envuelta en una trama de espionaje internacional cuando descubren que sus nuevos vecinos (Jon Hamm & Gal Gadot), una pareja de lo más sofisticada, son espías del gobierno. 

Película dirigida por Greg Mottola, director de Supersalidos (2007), Adventureland (2009) y Paul (2011) entre otras, con guion de Michael LeSieur, protagonizada por Zach Galifianakis -Resacón en Las Vegas (2009), En campaña todo vale (2012)-, Jon Hamm -The Town (2010), Sucker Punch (2011)-, Gal Gadot -Fast & Furious (2009), Batman V Superman (2016)- e Isla Fisher -Despedida de soltera (2012), Ahora me ves (2013)- y rodada íntegramente en Atlanta, Georgia (USA), tuvo un presupuesto de 40 millones de dólares y a día de hoy lleva recaudados a nivel mundial 28 convirtiéndose en un fracaso estrepitoso para la FOX. 
Bueno, tras ver la película no me extraña que haya sido un completo desastre en taquilla, estamos ante la típica comedia con pequeñas dosis de acción mil veces vista, véase el caso de las recientes Espías (Paul Feig, 2015) o Un espía y medio (Rawson Marshall Thurber, 2016). La trama nos presenta a Jeff Gaffney (Zach Galifianakis) y su mujer Karen (Isla Fisher), un matrimonio de clase media que vive en un barrio residencial de Atlanta. Jeff trabaja para recursos humanos en MBI, una empresa de ingeniería aeroespacial y Karen es diseñadora de interiores. Cierto día, tras mandar a sus dos hijos a un campamento de verano aparecen en su barrio unos nuevos vecinos, Tim Jones (Jon Hamm) y su escultural mujer Natalie (Gal Gadot), Tim escribe libros de viajes y Natalie tiene un blog de cocina y participa activamente en una ONG, pero realmente son espías enviados por el gobierno americano para infiltrarse en el trabajo de Jeff, ya que sospechan que algún empleado está vendiendo información clasificada a un terrorista internacional que se hace llamar Escorpión (Patton Oswalt). 
Esta es la premisa de la trama y a partir de aquí, pues ya os podéis imaginar, los típicos enredos pretendidamente cómicos -pero sin gracia- entre las dos parejas mientras se conocen unos a los otros, unos fingen que van de vecinos amigables, los otros empiezan a sospechar que algo raro pasa con los nuevos vecinos porque son demasiado perfectos, el típico matrimonio rendido ante la rutina que anhela una vida de aventuras pero al final se da cuenta de que como en el hogar en ningún sitio y todo repleto de esa plomiza y últimamente sobreexplotada inmadurez de todos los matrimonios cómicos de última hornada en plan Malditos Vecinos (Nicholas Stoller, 2014). En fin, no es que estemos ante una completa basura de película, pero el tema esta tan trillado y mil veces visto que ya aburre, si encima tenemos una peli aceptablemente bien rodada pero que canta a la legua que es totalmente alimenticia y un guion que no profundiza en nada ni le da una vuelta de tuerca a lo visto anteriormente en multitud de ocasiones, da como resultado una película, simpatiquilla y olvidable sin más, que no aporta nada y que es demasiado rutinaria y previsible en su desarrollo -el inicio es bastante potable e incluso algo divertido, pero en el momento en que se descubre el pastel de los vecinos y las dos parejas empiezan a interactuar a mi todo se me viene abajo-, vamos, que para una sesión doble un día de verano en el autocine con un buen peliculón tras ella se acepta, pero para dejarte el dineral de una entrada de cine por ella misma ni de coña. Para mí, que apenas me ha sacado una sonrisa, lo más destacable de la película ha sido comprobar que Gal Gadot tiene maneras para defenderse como actriz de acción y de paso comprobar lo bien que le sienta la lencería sexy a esta mujer. Por lo demás solo os la recomendaría si os reis con cualquier tontería o no tenéis nada mejor con lo que perder el tiempo, de lo contrario pegarle un vistazo a la estupenda Adventureland de este mismo director que os dejara mejor sabor de boca.

4 / 10