Título Original: La Madre Muerta
Año: 1993
Duración: 107 Minutos
País: España
Director: Juanma Bajo Ulloa
Guion: Juanma Bajo Ulloa / Eduardo Bajo Ulloa
Música: Bingen Mendizábal
Fotografía: Javier Aguirresarobe
Reparto: Karra Elejalde, Ana Álvarez, Lio, Silvia Marsó, Elena Irureta, Ramón Barea, Raquel Santamaría.
Productora: Gasteizko Zinema / Sogepaq
Género: Drama / Secuestros
Sinopsis: Ismael (Karra Elejalde) ha cometido varios asesinatos, pero sólo uno de
ellos, por sus consecuencias, continúa obsesionándole. La hija de una de
sus víctimas (Ana Álvarez), una niña de corta edad que presenció el
crimen, quedó tan impresionada que perdió la razón. Veinte años más
tarde, Ismael la secuestra para determinar si ella lo reconoce o no como
el asesino de su madre.
Segundo largometraje de Juanma Bajo Ulloa tras
Alas de Mariposa (1991). Rodado entre el País Vasco y Castilla y León,
estrenada en 1993 tras llegar avalada por su pase en numerosos festivales con
premios a Ulloa y Álvarez incluidos, con guion del propio Ulloa con la colaboración
de su hermano Eduardo, producida por Fernando Bauluz, con fotografía de Javier
Aguierresarobe, música de Bingen Mendizábal e interpretaciones de Karra
Elejalde, Ana Álvarez, Lio y Silvia Marso en sus papeles principales.
La película
está considerada para muchos la mejor del director e incluso se la tiene por
una obra de culto, según las palabras del propio Ulloa estamos ante "Un
cuento cruel, para adultos, que narra lo mismo que todos los cuentos desde
Caperucita Roja: el contraste entre inocencia y brutalidad". A mí,
personalmente me ha parecido una película que tiene un buen arranque pero que
se va desinflando a medida que pasan los minutos.
La historia nos presenta a
Ismael López (Karra Elejalde) un ladronzuelo y psicópata de manual que cierto día
entra a robar en casa de una restauradora, al toparse con ella le pega un
escopetazo y la mata, pero la mujer no estaba sola en casa, también estaba su
hija pequeña Leire (Raquel Santamaría). El tarao de Ismael no lo duda y le pega
un tiro también a la cría. 20 años después Ismael sigue siendo un delincuente
pero ahora tiene una compinche y amante llamada Maite (Lio). Ismael trabaja en
un Night Club sirviendo copas y cierto día al abrir el local se topa con Leire
(Ana Álvarez). Resulta que la cría sobrevivió al disparo y ahora pasa sus días
en una especie de manicomio ya que el disparo le dejo secuelas y desde entonces
no habla y es deficiente mental. Ismael que desde entonces vive obsesionado por
lo ocurrido y temiendo que la joven se acuerde de él y pueda identificarlo
decide que lo mejor es secuestrarla para saber si le recuerda y en ese caso
asesinarla.
Bueno, como he dicho antes me parece una película que va perdiendo
fuelle a medida que avanza, cierto es que es bastante cruel y sombría y los
paralelismos con Caperucita Roja se pueden ver en la relación entre los
personajes de Karra Elejalde y Ana Álvarez pero jamás se me ocurriría tildara
de obra maestra ni de culto. Tras un interesante arranque la película se vuelve
tediosa y repetitiva hasta el hartazgo, con un guion que da vueltas sobre sí
mismo una y otra vez, que apenas avanza y va perdiendo interés, al igual que
los personajes que tampoco tienen un recorrido dramático. Cierto es que Ana Álvarez
se marca un papelón, si no conociese a la actriz creería que es una deficiente
mental realmente, pero al final acaba por cansar su actuación por reiterativa,
de Karra Elejalde solo puedo decir que me ha parecido excesivo y pasado de
vueltas, con una interpretación más calmada hubiese dado poso y profundidad a
un personaje que al final resulta patético. En fin, que la peli no me ha
gustado nada, tras los primeros 20 minutos ya estaba ansiando que acabase, si
tuviese que resaltar algo interesante, además del prometedor punto de partida
seria la estupenda fotografía de Javier Aguirresarobe y la música de Bingen Mendizábal,
por lo demás me parece una película sobrevalorada.
2 / 10
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