Ghost Ship (2002)

Título Original: Ghost Ship

Título Traducido: Barco Fantasma

Año: 2002

Duración: 91 Minutos

País: Estados Unidos

Director: Steve Beck

Guión: Mark Hanlon, John Pogue

Música: John Frizzel

Fotografía: Gale Tattersall

Reparto: Julianna Margulies, Gabriel Byrne, Ron Eldard, Karl Urban, Isaiah Washington, Desmond Harrington, Alex Dimitriades, Emily Browning.

Productora: Warner Bros. Pictures / Village Roadshow Pictures / NPV Entertainment / Castle Rock Entertainment

Género: Terror / Fantasmas

Sinopsis: Construido en 1954, el trasatlántico Antonia Graza era el orgullo de la línea Italiana marítima. Un barco moderno que contaba con todo clase de lujos. Pero cuando el Antonia Graza partió hacia América, los pasajeros no eran conscientes del innombrable horror que durante el viaje se se cerniría sobre ellos, y el barco desapareció sin dejar rastro. Casi 50 años después, un grupo de rescate martítimo comandado por el Capitán Sean Murphy (Gabriel Byrne) lo descubre en medio del estrecho de Bering. 

Tras ver Deep Rising (1998) me ha dado por las pelis de género y espíritu de Serie B, como las que se hicieron sobre El Guardián De La Cripta -El Caballero Del Diablo (1995), El Club De Los Vampiros (1996)- las tenía muy frescas, mis opciones fluctuaban entre Ghost Ship (2002) o Virus (1999) que son las que me vinieron a la mente sin necesidad de ponerme a rebuscar y como Ghost Ship la recordaba menos fue la elegida.

El guion nos presenta un arranque en los años 60, el Antonia Graza era un transatlántico Italiano de lujo que hacia su viaje inaugural atravesando el Atlántico norte con dirección Nueva York, pero a mitad de travesía alguien -al que no vemos- asesino al pasaje -con unos métodos un poco gores- y el buque quedo a la deriva. Salto en el tiempo y nos plantamos en la actualidad, Murphy (Gabriel Byrne) dirige un equipo de rescate marítimo compuesto por Epps (Julianna Margulies), Dodge (Ron Eldard), Greer (Isaiah Washington), Munder (Karl Urban) y Santos (Alex Dimitriades). Cierto día, mientras celebran con unas birras el éxito de su ultima misión se les acerca Ferriman (Desmond Harrington), un piloto de salvamento que patrulla las aguas del estrecho de Bering diciéndoles que en uno de sus vuelos dio con un Transatlántico que parecía a la deriva y abandonado. Murphy, al ver las fotos reconoce el Antonia Graza y le salen los símbolos del dólar en las pupilas, tras hablarlo con su equipo deciden ir en su busca, pero Ferriman pone una condición; ira con ellos o no hay trato, el equipo acepta y todos emprenden el viaje hacia las heladas aguas de Bering. Pero claro, como dice el titulo de la peli, se trata de un Barco Fantasma, así que en cuanto lleguen a él, los símbolos del dólar se convertirán en autenticas pesadillas.

A ver, la peli se deja ver, pero me la esperaba –o recordaba- más terrorífica y al final se decanta más por aspectos psicológicos que por el puro terror, si se hubiesen afanado mas con el guion podría haber dado mucho más de sí, pero todo se limita a unos pocos sustos y poco más. Aun así, la película podría funcionar de lujo con unas birras en una sesión triple junto a las antes mencionadas Deep Rising y Virus ya que las tres comparten un barco en alta mar como motor de la acción. Esta producida por Robert Zemeckis y Joel Silver, dato a tener en cuenta para darle una oportunidad, lo malo es que falla mucho en el desarrollo, todo se queda a medio gas y la trama se desarrolla de manera brusca y tosca pese a tener un inicio muy prometedor, me da a mí que tanto el director como el guionista no han sabido muy bien lo que querían contar o como contarlo, pero pese a todo la película no es un bodrio, si os gusta el cine de género pasareis un rato entretenido, sobre todo si sois conscientes de las limitaciones y la falta de pretensiones de ella. En cuanto a los actores, quitando a Gabriel Byrne, que es un crack, los demás no es que sean grandes intérpretes pero aportan carisma y pese a ser un conjunto de clichés andantes no desentonan en una producción de estas características, como curiosidad decir que la niña protagonista es Emily Browning, la prota de Sucker Punch (Zack Snyder, 2011) y por ahí también pululan Julianna Margulies y Karl Urban, desconocidos en 2002, pero estrellas consagradas hoy en día. La película costo 35 millones y recaudo unos 30, así que ni recupero la inversión, un fracaso vamos. En fin, no me extenderé mucho más porque tampoco hay de donde rascar, la ambientación y atmosfera da el pego, un barco en alta mar siempre es muy cinematográfico, y si está abandonado mucho mas, todo lo que tiene que ver con el “recolector de almas” mola mucho pero apenas se profundiza en ello y para terminar, un apunte pajillero, la presencia de Francesca Rettondini, actriz con un breve papel, pero que enseña sus encantos y yo que lo celebro porque esta para ponerle un piso en Torremolinos. Ale, si queréis evadiros con una de fantasmas y buques encantados sin tener que darle mucho al tarro, esta es vuestra película, si buscáis algo mas sesudo ni os acerquéis a ella, a mi me parece bastante irregular, pero como este tipo de películas me molan y tienen cierto encanto cutre no me queda más que aprobarla, eso sí, con un cinco pelado.

5 / 10