Título Original: Anomalisa
Año: 2015
Duración: 90 Minutos
País: Estados Unidos
Director: Charlie Kaufman, Duke Johnson
Guión: Charlie Kaufman, Dan Harmon
Música: Carter Burwell
Reparto: David Thewlis, Jennifer Jason Lewis, Tom Noonan
Productora: Starburns Industries
Género: Animación / Drama
Sinopsis: La película tiene por protagonista a un motivador profesional que,
cuanto más ayuda a la gente, más monótona y anodina es su vida; todo el
mundo le parece y le suena igual. Hasta que la voz de una chica le suena
diferente y está dispuesto abandonarlo todo y a todos por alcanzar la
felicidad con ella.
Michael Stone (David
Thewlis) es una especie de motivador profesional que ha escrito un libro sobre
la atención al cliente del cual tiene que dar una charla en Cincinnati, tras un
largo viaje en avión desde Los Ángeles en donde ha dejado a su mujer e hijo da
con sus huesos en el hotel, allí, asqueado por un mundo que le parece carente
de sentido, vacio y repetitivo se cita con un viejo amor para intentar camelársela
de nuevo a ver si por esas deja de sentirse solo y vacio, pero el asunto se va
al traste y decide volver a su habitación, fumarse un cigarro y ponerse un
copazo, pero mira tú por dónde que en cierto momento escucha en el pasillo del
hotel una voz discordante, una Anomalía entre tanta igualdad, una voz diferente
que le provoca algo en su interior, es la voz de Lisa (Jennifer Jason Leigh)
una chica que ha acudido con una amiga a la ciudad para escuchar la charla de
Michael. Este, embelesado por la voz de Lisa acabara invitándola a su habitación
para tomar la última de la noche y poco a poco ambos pasaran una noche que quizás
les cambie la vida.
Charlie Kaufman escribe unos guiones más raros que un perro verde -Como Ser
John Malkovich (1999), Adaptation (2002)- y en esta ocasión se ha unido a Dan
Harmon -creador de esa pedazo de serie que es Community- para ofrecernos
nuevamente un original y muy cuidado guion para hablarnos de los problemas del
hombre contemporáneo, en este caso su vacío existencial al más puro estilo de
las suecadas de Bergman. Tenía mis reticencias antes de ver esta película -más
que nada por los muñecajos- pero a los 5 minutos de metraje ya estaba
totalmente atrapado y apabullado por la historia de este motivador desmotivado,
seductor en horas bajas y hombre abocado al tedio más absoluto y es que ver
deambular a este hombre mientras te metes en su psique es demoledor, si a eso
le sumamos un magnífico trabajo de stop-motion y un diseño de producción brutal
da como resultado un personaje apabullante, mucho mas creíble y veraz que el
noventa por ciento de las actuaciones reales que se ven hoy en día en el cine.
Y es que estamos ante un prodigio técnico sin grietas, pese a saber que todo lo
que se ve en pantalla ha sido creado artificialmente me he metido en la película
de lleno, todo está hecho a la perfección, desde los personajes, su forma de
comportarse y moverse hasta la ambientación, lo único que me ha recordado en
cada momento que estaba frente a monigotes ha sido las hendiduras de sus
rostros, si no ni me acuerdo. En fin, que estamos ante una maravilla -por lo
menos para mí- de película que pese a no tener una potente historia narrativa
como tal si que la tiene en cuanto a lo psicológico y emocional, es tierna,
dulce, amarga, divertida, descorazonadora, conmovedora, agridulce... es todo
eso y mucho mas, ¡es la vida en si misma!. Las miserias del día a día, el vacio
al que nos vemos abocados, la repetición constante hasta que en cierto momento
salta una chispa que te enciende de nuevo pese a que esa chispa siempre acaba
siendo momentánea, tras eso todo vuelve a empezar y por muy especial que nos
parezca alguien al final del día todos cagamos por el mismo agujero. Muy recomendable.
7.5 / 10
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