Wheels Of Fire (1985)

Título Original: Wheels Of Fire

Título Traducido: Ruedas De Fuego

Año: 1985

Duración: 81 Minutos

País: Estados Unidos

Director: Cirio H. Santiago

Guión: Frederick Bailey

Música: Christopher Young

Fotografía: Ricardo Remias

Reparto: Gary Watkins, Laura Banks, Lynda Wiesmeier, Linda Grovenor, Joe Mari Avellana, Joseph Zucchero, Steve Parvin.

Productora: Rodeo Productions

Género: Acción / Futuro Postapocalíptico

Sinopsis: En el mundo del futuro, los guerreros de la autopista imponen su ley. Trace intenta sobrevivir enfrentándose a esos salvajes y a sus máquinas de destrucción. 

¡Es hora de volver a la casquería cinematográfica! Hacía tiempo que no me metía entre pecho y espalda la típica película ochentera rodada en Filipinas y con el poco presupuesto y la cutrez como bandera, pero tras verme deslumbrado por el maravilloso poster y ver que estaba dirigida por el mítico Cirio H. Santiago - Puño Desnudo (1981), Cazadores Del Futuro (1986) - algo en mi interior me dijo que tenía que verla si o si, aunque mis ojos llorasen sangre y mi cerebro implosionase durante el visionado.

El guion -por llamarlo de alguna manera- nos presenta un futuro distopico y apocalíptico - A rebufo de Mad Max- en el que bandas de maleantes vestidos de cuero al más puro estilo Judas Priest campan a sus anchas, tras una pelea con tubos de hierro bastante cutre, un grupo de aficionados al sado secuestra a Arlie (Lynda Weismeier), así que su hermano Trace (Gary Watkins), un Mel Gibson de hacendado mezclado con el Carlos Lozano de los años noventa saldrá en su búsqueda, por el camino se cruzara y salvara la vida a Stinger (Laura Banks), una guerrera del asfalto a la que acompaña su fiel halcón, mas tarde se les unirá Spike (Linda Grovenor), una jovencita con poderes mentales a la que los acólitos de las tachuelas mataron a su abuelo y fue capturada por unos morlocks sacados de la película El Tiempo En Sus Manos (1960), mas tarde, los tres darán con sus huesos en una comunidad de creyentes que pretenden construir un cohete para darse el piro a otro planeta llamado Paraíso, mientras todo esto sucede la hermana de Trace pasara por un calvario en el campamento de los metaleros de baratillo, el jefe de esta banda de psicópatas llamado Scourge (Joseph Anderson) se la pasara por la piedra y de paso el agradecido espectador disfrutara de lo lindo deleitándose con el generoso y poderoso tetamen de Lynda Weismeier. Al final, todos acabaran coincidiendo en un descampado y liándose a tiros y explosiones hasta que no quede ningún extra vivo.

Bueno, este tipo de cine hay que verlo con el chip adecuado porque si no es imposible y puede convertirse en una experiencia traumática, era la época en que los outsiders de Hollywood emigraban a Filipinas para rodar sin dinero, sin leyes y sin seguro películas que estaban hechas exclusivamente para el mercado de los auto cines americanos, la chavalería de aquella época iba a los autocines a darse el lote y los que perpetraban estas películas lo sabían, así que el guion, la verosimilitud y la producción era lo de menos, aquí se trataba de abrumar al espectador con tiros, explosiones, coches y sobre todo mucha jamelga despechugada, todo a muy bajo coste, pero no por ello carente de entretenimiento, de hecho yo me lo he pasado pipa viéndola, me esperaba un truñaco del trece y tengo que decir que pese a ser una copia barata de Mad Max y ser una serie z en toda regla la he disfrutado como un perro e incluso me ha entretenido, ni se me ha hecho pesada ni me ha aburrido y eso ya es mucho decir para una película como esta, está claro que no da el nivel, las explosiones son cutres, los actores pésimos -pero aun así tienen su carisma-, los diálogos dan pena y los trucos para abaratar costes como acelerar el fotograma para que parezca que los coches van mas rápido huelen a la milla, pero con eso y todo es tan demencial que no me queda otra que recomendarla, si os abrís unas cervezas mientras la veis pasareis una horita y media bastante placentera.

6 / 10