Título Original: Rocketeer
Año: 1991
Duración: 110 Minutos
País: Estados Unidos
Director: Joe Johnston
Guión: Danny Bilson, Paul De Meo (Cómic: Dave Stevens)
Música: James Horner
Fotografía: Hiro Narita
Reparto: Bill Campbell, Alan Arkin, Jennifer Connelly, Timothy Dalton, Paul Sorvino, Terry O´Quinn, Ed Lauter, Jon Polito, Margo Martindale.
Productora: Touchstone Pictures / Walt Disney Pictures
Género: Aventuras / Cómic
Sinopsis: Hollywood, años treinta. Después de robar un arma secreta en Los
Ángeles, la mafia la esconde en un aeródromo. Se trata de un propulsor
individual que convierte a quien lo utiliza en un auténtico hombre
cohete. Los nazis están muy interesados en ella. Fortuitamente llega a
manos de Cliff Secord, un piloto acrobático a quien todos intentarán
atrapar.
Los Ángeles 1938. La mafia,
auspiciada por un actor (Timothy Dalton) con ínfulas megalómanas ha robado un
prototipo de cohete-mochila (Jet Pack) pero debido a que los agentes federales
van tras ellos no les queda más remedio que esconder el cohete en el hangar de
un equipo de vuelo acrobático formado por Cliff Secord (Billy Campbell) y su
amigo e instructor Peevy (Alan Arkin), estos están casi en la bancarrota por
culpa de los mafiosos y los federales que les han destrozado su único avión,
así que deciden quedarse con el cohete para hacer exhibiciones y sacarse unas
buenas perras, hecho que a la larga les traerá más de un problema ya que además
del actor megalómano y la mafia, también los nazis andan tras el cohete. Cliff
deberá dejar de ser un simple acróbata para luchar contra el crimen y
convertirse en Rocketeer, todo esto mientras intenta arreglar su situación
sentimental con su novia Jenny (Jennifer Connelly).
Aunque parezca mentira hubo
un tiempo en que los súper héroes de la Marvel no copaban las salas de cine, un
tiempo en que había cine de súper héroes –sin súper- que hacían las delicias de
espectadores como yo que se conformaban con ver una entretenida película de
aventuras con aire clásico y un héroe que pese a no ser Súper emocionaba de
igual manera o incluso más que los de hoy en día, eran los años noventa y ahí estaban
The Phantom (1996) o la injustamente menospreciada The Shadow (1994) con el
gran Alec Baldwin, pero una de las que abrió brecha fue esta The Rocketeer,
basada en la novela grafica de Dan Stevens y dirigida por Joe Johnston –Spielberg
wannabe- que a principios de la década presento esta –para mí- gran película de
aventuras clásica que homenajeaba a los grandes seriales de los años treinta y
cuarenta. Que el guion es una chorrada, vale. Que es muy infantil en su
desarrollo, vale también. Que el prota no tiene carisma, Ok, pero a mi esas
menudencias me la sudan porque la primera vez que vi la película disfrute como
un enano y desde entonces no ha perdido su encanto, sigo disfrutándola como
siempre, me sigue gustando ese estilo tan naif y tontorrón pero lleno de magia,
me encantan los gangsters, los nazis fuleros al más puro estilo de Indiana
Jones, ese Timothy Dalton convertido en un sosias de Errol Flynn, me mola el dúo
de Cliff (Bill Campbell) y Peevy (Alan Arkin) y sobre todo me sigue apasionando
ver a la guapísima Jennifer Connelly con ese vestido de seda blanco, pero la película
tiene mucho mas, tiene una ambientación y unos decorados de nota, una fotografía
cojonuda y por encima de todo una impresionante banda sonora a cargo de James
Horner con un tema central que es pura aventura, por no hablar de los momentos
en que Rocketeer está en pleno vuelo, son –para la época- simplemente
magistrales. En fin, que podría hablar durante días sobre lo mucho que me mola
la peli, pero reconozco que para apreciarla como es debido debes haber crecido viéndola,
sino puedo llegar a entender que no llegue a gustar ya que no tiene mucho
desarrollo que digamos, pero aun si, yo siempre la defenderé y volveré a ella
año tras año porque me parece una película de aventuras cojonudamente mágica.
7 / 10
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