Título Original: El Extraño Viaje
Año: 1964
Duración: 98 Minutos
País: España
Director: Fernando Fernán Gómez
Guión: Manuel Ruiz Castillo, Pedro Beltrán (Argumento: Luis García Berlanga)
Música: Cristóbal Halffter
Fotografía: José F. Aguayo (B&W)
Reparto: Carlos Larrañaga, Tota Alba, Lina Canalejas, Rafaela Aparicio, Jesús Franco, Sara Lezana, María Luisa Ponte.
Productora: Ízaro Films / Pro Artis Ibérica
Género: Intriga / Drama
Sinopsis: En un pequeño pueblo de provincias, cercano a la capital, vive una
familia compuesta por tres hermanos: la dominante y severa Ignacia y los
tímidos y retraídos Paquita y Venancio. La monotonía de la vida del
pueblo sólo se rompe los sábados cuando llega un conjunto musical de
Madrid para amenizar con sus canciones el fin de semana. Un sábado de
tormenta, Paquita y Venancio, que son muy miedosos, oyen ruidos y van
buscando protección a la habitación de su hermana. Allí ven a alguien,
pero Ignacia lo niega rotundamente.
Hacia muchísimo que no veía
este pedazo de peliculón del maestro Fernando Fernán Gómez -La Vida Por Delante
(1958), El Viaje A Ninguna Parte (1986)- y me ha maravillado al igual que la
primera vez. La historia transcurre en un pequeño pueblo de provincias en el
que el tedio y la monotonía solo se rompen los sábados por la noche cuando hace
acto de presencia una banda musical proveniente de Madrid, en dicha banda,
llamada orquesta Guacamayos canta y toca la guitarra Fernando (Carlos
Larrañaga), en torno a los bailes y la música se reúne casi todo el pueblo,
entre los que destacan Angelines (Sara Lezana), una joven con ansias de ser
artista y salir del pueblo, Beatriz (Lina Canalejas), una joven empleada de la mercería
que regenta la malhumorada y chapada a la antigua Doña Teresa (María Luisa
Ponte) y un grupo de simpáticos ancianos que se dedican a deleitarse con los
modernos bailes de Angelines y... he dicho casi todos porque hay tres vecinos
del pueblo que jamás se dejan ver por el baile y que casi y exclusivamente
salen de casa para ir a misa los domingos, estos son Ignacia (Tota Alba), una
señora estirada, severa y antipática y sus dos inocentones hermanos con los que
vive, Paquita (Rafaela Aparicio) y Venancio (Jesús Franco). Una noche de sábado,
mientras el pueblo entero disfruta de la banda musical en casa de estos tres se
va la luz, Paquita escucha ruidos en casa y temiéndose que se trate de un ladrón
acude a su hermano Venancio que viendo que no puede tranquilizarla acude a su
vez a su hermana Ignacia, esta les dice de mala manera que se olviden de los
ruidos y los manda a dormir, pero tras la puerta Paquita ve a alguien que está
con su hermana y les escucha hablar sobre "hacer desaparecer a los dos
hermanos antes de irse al extranjero" lo que dará arranque a una magnifica
trama de cine negro mezclada con ramalazos de autentico costumbrismo español de
la época.
Mucho deberían aprender los cineastas españoles de hoy en día de esta absoluta
obra maestra, estamos ante -para mí- una de las mejores películas hechas en
este país y a la altura de cualquier clásico de fuera de nuestras fronteras, Fernán
Gómez junto a Luis García Berlanga -suyo es el argumento- nos dejaron para la
historia una mezcla de ¿terror?, ¿comedia?, ¿drama?, ¿Suspense?... Todo eso y más,
una jodida maravilla donde los géneros se mezclan al igual que durante la película
se mezclan las clases altas y las bajas, el libertinaje y el conservadurismo o
el "jamón" y el vino, todo rodeado por una atmosfera entre macabra y
surrealista. En cuanto a los actores están todos -y cuando digo todos, es
todos- deslumbrantes, desde Tote Alba -modo severa On Fire-, pasando por ese
par de lelos entrañables que ejecutan a la perfección Jesús Franco y Rafaela
Aparicio, esa mercera cascarrabias interpretada por María Luisa Ponte o los dos
enamorados Carlos Larrañaga y Lina Canalejas, ah, y sin olvidarme de la
sensual, pizpireta y adorable Sara Lezana que desde el primer baile al inicio
de la película ya me tiene atrapado en sus redes. En fin, una película que me
encanta, cada vez que la veo me fascina mas, esa mansión con esa atmosfera al más
puro estilo Hammer, ese bar de reunión, la plaza del pueblo con los viejos tomándose
sus vinitos, la banda de música, los movimientos de Angelines, las tinajas de
vino, esas tinajas con "jamoncito", el retrato de la España y los
españolitos de la época, el cura, el alcalde... la mire por donde la mire no le
veo ninguna pega, tiene un acabado y un guion tan bien hilado que a los cinco
minutos ya estas enganchado y no te suelta hasta el último plano, maravillosa película.
Solo me queda recomendarla y deciros que; "Deja la lujuria un mes, y ella
te dejara tres".
10 / 10
No hay comentarios:
Publicar un comentario