No Escape (2015)

Título Original: No Escape

Título Traducido: Golpe De Estado

Año: 2015

Duración: 101 Minutos

País: Estados Unidos

Director: John Eric Dowdle

Guión: Drew Dowdle, John Erick Dowdle

Múscia: Marco Beltrami, Buck Sanders

Fotografía: Dana Gonzales, Léo Hinstin

Reparto: Owen Wilson, Lake Bell, Pierce Brosnan, Sterling Jerins, Spencer Garrett, Claire Geare, Byron Gibson, Jim Lau.

Productora: Bold Films / Brothers Dowdle Productions / Living Films

Género: Thriller

Sinopsis: Una familia estadounidense, recién llegada a un país del Sudeste Asiático por motivos laborales, se encuentra atrapada en medio de un violento golpe de Estado. Desesperadamente intentarán escapar de un ambiente en el que los extranjeros, como ellos, son inmediatamente ejecutados.

John Erick Dowdle, autor de Quarantine (la versión norteamericana de “Rec”), presenta Golpe de estado un thriller solvente –si dejas el cerebro aparcado durante el visionado- que va directamente al grano y que tiene un irónico e interesante final. Protagonizada por Owen Wilson, Lake Bell y la presencia de Pierce Brosnan la película narra como una familia estadounidense se traslada a vivir a un país asiático por motivos laborales del cabeza de familia; es un alto cargo de una empresa potabilizadora de agua. Simultáneamente al traslado en dicho país asiático se produce un golpe de estado que hará tambalearse al país y que tendrá a los extranjeros –a los que culpan e todos los males- en el epicentro del mismo. De buenas a primeras los extranjeros -entre los que se encuentra nuestra familia protagonista- que habitan los hoteles son atacados y asesinados a sangre fría, teniendo que huir la familia y adentrarse en el laberinto de callejuelas que componen las estrechas calles de la ciudad. Una lucha por la supervivencia ante unos golpistas que buscan una caza mayor, a ser posible americanos.

Bueno, estamos ante un thriller de acción frenético que en los ochenta hubiese sido un producto Cannon de la hostia, pero que hoy en día no surte el mismo efecto, pese a partir de una premisa bastante potable el transcurso de los acontecimientos a los que se ven arrastrados esta familia es altamente inverosímil, vale que una cinta de género como esta debe saltar el tiburón en ciertos momentos, pero es que aquí todo dios la palma por doquier y esta familia –con dos niñas a cargo- sale airosa de todos y cada uno de los envites que el destino les pone por delante, pero en fin, dejando de lado la verosimilitud hay que decir que si vas con el chip adecuado la película entretiene y es bastante disfrutable, la acción es frenética, no hay apenas explosiones o efectos digitales –cosa que se agradece- y la tensión va en aumento minuto a minuto, Owen Wilson cumple como padre sufridor y abnegado, Lake Bell hace lo que puede como sidekick y Pierce Brosnan da personalidad y carisma al desaliñado mercenario/espía/whatever Hammond, también tenemos cierta crítica al capitalismo salvaje y la globalización pero todo se queda en la superficie, como las motivaciones de los nativos del lugar que se explican en tres líneas de dialogo y a fer la ma. O sea, tenemos un guion que apenas se sostiene pero que se solapa con el ritmo frenético de la película, la buena ambientación y la tensión creciente que por lo menos te mantienen en vilo hasta el final de la película, sabiendo lo que vas a ver no te puedes llevar ninguna sorpresa, cambiamos a Owen Wilson por Chuck Norris y tendríamos un producto Cannon legendario.

5.8 / 10