Título Original: Calabuch
Año: 1956
Duración: 92 Minutos
País: España
Director: Luis García Berlanga
Guión: Luis García Berlanga, Leonardo Martín, Florentino Soria, Ennio Flaiano
Música: Angelo Francesco Lavagnino & Guido Guerrini
Fotografía: Francisco Sempere
Reparto: Edmund Gwenn, Valentina Cortese, Franco Fabrizi, Juan Calvo, Felix Fernandez, Jose Luis Ozores, José Isbert, Francisco Bernal, Manuel Alexandre.
Productora: Águila Films / Films Costellazione
Género: Comedia
Sinopsis: En plena Guerra Fría, el profesor Hamilton, un sabio ingenuo que creía
en las bondades de la energía nuclear, al darse cuenta de su error, huye
y se lleva consigo todos sus secretos. Encuentra refugio en Calabuch,
un pueblo mediterráneo que a él le parece maravilloso porque la gente se
limita a vivir y conserva el sentido del humor y de la amistad.
En plena Guerra Fría y con la obsesión por los misiles
nucleares a toda mecha, un sabio investigador (Edmund Gwenn) es trasladado a
una base en el Mediterráneo, desencantado por el mundo que está colaborando a
crear decide darse el piro y se fuga creando el caos, así es como da con sus
huesos en el pintoresco pueblo de Calabuch en la costa este Española, allí, sin
revelar su autentica identidad –será tan solo Jorge- entablara amistad con el
Langosta (Franco Fabrizi) un trompetista y contrabandista al que conoce en la cárcel
del pueblo que es donde irán a parar los huesos de Jorge, convirtiéndose en su "Casa"
a partir de entonces. poco a poco y debido a su amabilidad y buen humor ira
conociendo y metiéndose en el bolsillo uno a uno a los peculiares habitantes de
este pequeño pueblo costero; el cabo y mandamás de la cárcel Matías (Juan
Calvo), Eloísa (Valentina Cortese), profesora del colegio, el Cura Don Félix (Félix
Fernández) o al encargado del Faro (Pepe Isbert) entre muchos otros, todo esto
mientras se nos muestra de forma costumbrista y con maneras un poco
surrealistas al estilo (salvando las distancias) de Amanece que no es poco (1989) el día
a día del pueblo, corridas de toros, desfiles de romanos, la vida en el bar, concursos
de lanzamiento de cohetes, las clases en el colegio, etcétera, así hasta que al
fin se descubre quien es el tal Jorge y la marina se presenta en el pueblo para
llevárselo lo que pondrá en pie de guerra a todos los amigos de Jorge para
intentar que no se lo lleven (magnifica secuencia). Peliculón cargado de
ternura, humor, personajes impagables, buen rollo y grandes momentos, nunca la había
visto y ha sido toda una sorpresa para mí, no me esperaba que fuese tan buena,
me ha dejado un gran sabor de boca y mientras la veía no se me iba la sonrisa
de la boca. La historia te mete de lleno en la película y en la vida de
Calabuch, cada personaje que sale vale su peso en oro, desde el tierno y bonachón
de Jorge, pasando por su amigo del alma Langosta hasta ese mítico encargado de
Faro al que da vida un brutal Pepe Isbert. Película absolutamente recomendable
tanto por sus formas como por su fondo. Calabuch es un paraíso en el que todos deberíamos
perdernos.
9 / 10

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