Título Original: Deadline USA
Título Traducido: El Cuarto Poder
Año: 1952
Duración: 87 Minutos
País: Estados Unidos
Director: Richard Brooks
Guión: Richard Brooks
Música: Cyril Mockridge
Fotografía: Milton Krasner
Reparto: Humphrey Bogart, Ethel Barrymore, Kim Hunter, Ed Begley, Warren Stevens, Paul Stewart, Martin Gabel, Joe De Santis, Fay Baker
Productora: Twentieth Century-Fox
Género: Periodismo
Sinopsis: Cuando el 'New York Day' está a punto de ser vendido por sus
propietarios, Ed Hutcheson, el editor del periódico, decide sacar a la
luz los turbios negocios de un importante jefe mafioso.
En una ciudad corrompida y dominada por el capo mafioso
Rienzi (Martin Gabel), el diario "The Day", comprometido con los
hechos y la buena información, va a ser vendido a un poderoso propietario de
medios de comunicación, circunstancia que acarreará el despido de la redacción
y el cierre del periódico. A ello se opondrá su redactor jefe (Humphrey Bogart),
un hombre íntegro que se resiste a separarse de su esposa (Kim Hunter), y que
en vez de bajar los brazos y aceptar una jugosa indemnización, se embarcará
(ayudado por toda la redacción) en una peligrosa investigación periodística
contra el mafioso local. Peliculón con un Humphrey Bogart dándolo todo creando
un personaje (Ed hutcheson) magnifico e icónico con una rapidez verbal descomunal,
La película transmite a la perfección el ambiente de una redacción, con sus
prisas, las constantes consultas, órdenes y decisiones características.
Soberbia puesta en escena, especialmente en los momentos más corales del filme
(Todas las escenas que acontecen en la redacción del The Day), destacando la
secuencia en el bar al que acuden los periodistas al final de su jornada para
celebrar el funeral del periódico (Divertidísima y ocurrente) Los actores están
todos perfectos, aportando numerosos contrapuntos humorísticos que llenan de
vida a sus personajes, con un guion perfectamente escrito lleno de ritmo e
impecablemente escenificado y de bola extra, una contundente critica (a los medios) y a la vez
carta de amor al verdadero periodismo (muchos de los que se llaman periodistas
en este país deberían verla y luego pedir perdón por sus miserables vidas) y a
los valores democráticos. Una película que no había visto y que me ha parecido
cojonudamente buena, ágil y endiabladamente chispeante, no os la perdáis.
8.5 / 10
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