Título Original: Red Hill
Año: 2010
Duración: 110 Minutos
País: Australia
Director: Patrick Hughes
Guión: Patrick Hughes
Música: Dimitri Golovko
Fotografía: Tim Hudson
Reparto: Ryan Kwanten, Steve Bisley, Claire Van Der Boom, Kevin Harrington, Tommy Lewis, Jim Daly, Richard Sutherland, Eddie Baroo, Ken Radley, Jesse Spence
Productora: Arclight Films / Hughes House Film / Screen Australia / Wildheart Films / Wolf Creek Pictures
Género: Thriller / Acción / Western
Sinopsis: Cuando un joven oficial de policía, el alguacil Shane Cooper, se
traslada a la pequeña ciudad de Red Hill con su esposa embarazada, lo
hace con la esperanza de comenzar una nueva familia. Pero cuando un preso escapa de prisión los oficiales de
policía locales entran en pánico, el primer día de Shane en servicio
rápidamente va de mal en peor. Jimmy Conway, un asesino condenado a
perpetuidad en la cárcel, regresa a la ciudad aislada en busca de
venganza. Ahora, atrapado en medio de lo que se convierte rápidamente en
un baño de sangre horripilante, Shane se verá obligado a tomar la ley
en sus propias manos si es que quiere sobrevivir.
Shane Cooper (Ryan Kwanten) es un policía al que destinan
en la pequeña ciudad de Red Hill, allí llega con su mujer embarazada ya que
tras sufrir un aborto, el médico les ha recomendado huir de la ciudad a un
sitio más pequeño para evitar el estrés y que el embarazo vaya a buen puerto.
Tras la mudanza, Cooper inicia su primer día en su nuevo destino con mal pie ya
que entre tanto trasto ha extraviado su pistola reglamentaria, esto hará que el
Sheriff local (Steve Bisley) lo tenga entre ceja y ceja de primeras, para colmo
el resto de compañeros de la comisaria tampoco lo tragan demasiado y para su
primera patrulla lo ningunean y le dejan sin coche con lo que deberá patrullar
con un caballo al estilo del viejo oeste –Australiano en este caso-, el día
transcurre más o menos plácidamente hasta que en la televisión anuncian que un
preso condenado a cadena perpetua (Tommy Lewis) se ha fugado, en ese momento el
Sheriff entra en pánico porque deduce –algo que más tarde se explicara en
profundidad- que el preso se dirigirá directo a Red Hill, así que monta un
grupo de mercenarios entre sus ayudantes y algunos vecinos con propensión al
tiroteo para dar caza al preso. Así arranca este potente thriller a mitad
camino del western del director Patrick Hughes –Los Mercenarios 3 (2014)- que aquí
hace un Juan palomo, dirige, escribe el guion e incluso edita la película para
crear una pequeña joya del genero, se le podrán achacar cosas como que el guion
no da para mucho o que ciertas escenas carecen de lógica –es un opera prima-,
pero la película va como un tiro, te hace una presentación de los personajes
breve pero concisa para que sepas de qué pie cojea cada uno, la historia atrapa
desde el minuto uno y no te suelta hasta el final, que no por obvio deja de ser
condenadamente bueno, pero si hay algo que merece ser resaltado en esta producción
son principalmente tres aspectos, la jodidamente maravillosa fotografía de Tim
Hudson que deja estampas auténticamente míticas y deslumbrantes, la poderosa
banda sonora de Dimitri Golovko, un autentico crack que compone unas melodías que
además de venir al pelo con lo que vemos en pantalla son brutales musicalmente
y la atmosfera en si. En resumen, una Thriller mezclado con un Western –esos planos
a caballo- con sus dosis de película de acción de la vieja escuela que mola lo
que no está escrito –dentro de su simpleza argumental-, a mi –harto de las
mierdas que se hacen hoy en día- me ha fascinado, es imposible no quedarse
perplejo ante la puesta en escena de esta película, un diamante en bruto no muy
conocido pero que vale mucho la pena como ejercicio de evasión y puro disfrute.
Absolutamente recomendable.
8.5 / 10
No hay comentarios:
Publicar un comentario